Según la sentencia a la que ha tenido acceso Economist & Jurist, el acusado, de nacionalidad portuguesa, durante el curso de las elecciones sindicales de la empresa en 2019, convocó en dos ocasiones reuniones con los empleados en un almacén del aeropuerto de Barcelona-El Prat JT con el objetivo de amedrentar a los trabajadores e influir en su voto en las mencionadas elecciones, indicando que, en el caso de que ganara Comisiones Obreras y no el Sindicato de Unión General de Trabajadores (UGT), el cual se presentaba por primera vez a estas elecciones, se reduciría la plantilla en un 25%.
Tras las elecciones, el sindicato ganador fue UGT, no realizándose ningún despido. Dicho de otro modo: al conseguir el acusado lo pretendido no hizo lo que dijo que habría hecho en caso contrario. Sin embargo, el acusado ha sido juzgado y condenado por la conducta dolosa de amedrentar a fin de obtener un determinado fin, independientemente de que el mismo se obtenga o no.